martes, 18 de noviembre de 2014

¿A dónde van las malas amigas?



“A poca gente quiero de verdad, y de muy pocos tengo buen concepto. Cuanto más conozco el mundo, más me desagrada, y el tiempo me confirma mi creencia en la inconsistencia del carácter humano, y en lo poco que se puede uno fiar de las apariencias de bondad o inteligencia.”

Amigas y amigos… ¿Cómo es posible que la mayoría de veces elija tan mal? Soy de las personas que cree mucho en la gente, que piensan que la mayoría son buenos y que nunca llegarían a hacerme nada malo, soy una ingenua, lo sé. Quizá demasiado confiada.

La psicóloga Rocío Villacorta dice que las personas no son malas, sino sus actos; es injusto descalificar a una persona solo por un acto mal hecho, que todos cometemos errores porque somos humanos pero un acto no nos puede volver la personas más despreciable del mundo. Ella tiene razón, es cierto que no podemos quitarle todos los méritos que uno realizo, solo por haber obrado mal, solo por un acto. Pero es difícil verlo de esa forma cuando te han decepcionado, cuando han traicionado tu confianza, cuando han roto tu corazón.

Diversas razones, motivos o circunstancias llevan a las personas a hacer lo que hacen, nadie sabe porque, ni cuándo, ni cómo ni dónde; solo sabemos que lo hizo. Y es difícil perdonar cuando tú depositaste tu confianza en alguien pero él o ella no supieron valorarlo.

He tenido continuas decepciones a lo largo de mi vida, no solo en las relaciones amorosas, sino también en la parte amical y creo que las traiciones duelen más cuando vienen de los amigos(as) que cuando vienen de algún enamorado. Tengo todas esas experiencias guardadas en mi mente pero la que más me marco y me dejo devastada fue cuando mi mejor amiga se metió con mi enamorado, en ese entonces “Ariadna” era mi mejor amiga y “Tadeo” mi enamorado, ella ahora ya no es mi mejor amiga ni el mi enamorado y es que una vez que las personas pierden mi confianza es muy difícil que la recuperen. Pero es muy distinto al conocer a nuevas personas, es como si me olvidara de todo lo malo que las personas anteriores me han hecho y confió plenamente en ellos. Si hay algo que me debo atribuir, no sé si será bueno o malo, es que soy muy entregada a cualquier amistad; es decir confió plenamente en mis amigos, los defiendo a capa y espada, y daría mi vida por ellos sin pensarlo dos veces.

“Mi buena opinión, una vez perdida, lo está para siempre.”

Yo sinceramente quisiera no sacar conclusiones apresuradas con el último hecho que ha pasado, pero es imposible no hacerlo. ¿Qué situaciones pueden llevar a una persona, para que te bloquee de whatsapp? ¿Ya no quiere ser tu amiga? ¿Qué paso aquí? ¿Cuándo paso todo esto, que yo no me entere? No sé qué pensar, no sé qué decir, por mi parte yo juraba que nos llevábamos de maravilla, nunca hemos discutido, ni hemos tenido esas peleas en las que uno se deja de hablar con la otra persona por meses, además deposite mi confianza en aquella persona, realmente la estimaba mucho, la consideraba algo así como una hermana pero… ¿Qué puedo hacer? Solo esperar que ella se comunique conmigo si es que algún día lo hace, y si no ya sabemos para la próxima en quien no se debe confiar. Y que hay  que tener más cuidado al elegir a mis amigos(as).

*Cambie los nombres para mantenerlos en anonimato.

miércoles, 12 de noviembre de 2014

#ÉlPorElla (HeForShe)



“A mí me emociona muchísimo el hecho de asustarme porque significa que voy a escribir sobre algo que hasta entonces me daba miedo expresar”


 ElPorElla es una campaña lanzada por la ONU, de la cual Emma Watson fue nombrada embajadora; esta campaña busca fomentar o incentivar el feminismo. Pero antes de que piensen que soy una persona que odia a los hombres, debo de aclarar esto.

De acuerdo a la Real Academia Española (RAE), feminismo es un movimiento que exige para las mujeres iguales derechos que para los hombres y según Wikipedia es un conjunto heterogéneo de ideologías y de movimientos políticos, culturales y económicos que tienen como objetivo la igualdad de derechos entre varones y mujeres, así como cuestionar la dominación y la violencia de los hombres sobre las mujeres y la asignación de roles sociales según el género.

Después de haber hecho esta aclaración prosigo con lo que les iba a relatar.

Yo soy feminista. Sí. Han pasado diversas circunstancias para que yo me convierta en feminista, he sufrido de acoso, muchas veces han violado mis derechos, me han menospreciado por ser mujer, me han minimizado, no me han dado el lugar que me corresponde, me han ofendido, en fin , un millón de cosas más; que hicieron posible ese cambio en mí. A mi parecer todo comienzo por haber nacido en el seno  de una familia machista, donde siempre hubo preferencia por los hombres y las mujeres siempre fueron dejadas de lado, sin poder opinar ni refutar sobre alguna decisión familiar. De pequeña yo veía eso y  me quedaba callada, no sabía lo que significaba, no tenía idea de lo que realmente se trataba todo esto, pero fui creciendo y conforme iba pasando el tiempo decidí no pasarlo por alto. También tuve influencia de mis profesoras del colegio Enrique Espinosa, ellas decían constantemente que no debíamos dejarnos pisotear por nadie y que debíamos defender nuestros derechos siempre, aprendí muchas historias de personajes famosos como Christine de Pizan, Mary Wollstonecraft, Emmeline Pankhurst, Sojourner Truth, Lucretia Mott, Lucy Stone, Elizabeth Cady Stanton, Susan B. Anthony, Sarmiza Bilcescu , Elisa Leonida Zamfirescu, Simone de Beauvoir, Betty Friedan, Kate Millett, Shulamith Firestone, Anita Hill, Rebecca Walker, Margaret Atwood, Chimamanda Ngozi Adichie, Marcela Serrano, Liza Marklund, Melania Mazzuco, Isabel Allende ,Gabriela Mistral, etc. Y últimamente que he sido fuertemente influenciada por Warsan Shire con sus magníficos poemas con una fuerte carga feminista.

Así fue como poco a poco fue creciendo el sentimiento en mí, así fue como me convertí en feminista y desde ahí digo: “Feminista he sido siempre y siempre lo seré, desde el inicio de mis días, hasta el fin”

Por esta razón hago un llamado a todos, hombre y mujeres para que sigan esta lucha, debemos hacer valer nuestros derechos, que nos respeten y nos den el lugar que nos corresponde, que nunca más vuelvan a minimizarnos, porque no somos mejores ni peores, somos iguales y merecemos respeto.

Aquí les dejo un pequeño discurso de la embajadora de la ONU, Emma Watson: "Hoy estamos lanzando una campaña llamada HeForShe (ÉlPorElla). Me dirijo a ustedes porque necesitamos de su ayuda. Queremos terminar con la inequidad de género y, para hacerlo, necesitamos que todos se involucren. Esta es la primera campaña en su tipo en las Naciones Unidas. Queremos tratar de movilizar a cuantos hombres y niños podamos para que sean agentes de cambio, y no sólo hablar de ello. Queremos tratar de asegurarnos de que sea algo tangible.

Fui designada como Embajadora de Buena Voluntad de ONU Mujeres hace seis meses, y mientras más hablé sobre feminismo, más me di cuenta de que luchar por los derechos de las mujeres muy a menudo es sinónimo de odio hacia los hombres. Si hay algo de lo que estoy segura, es que esto debe terminar.

Es conveniente recordar que el feminismo, por definición, es la creencia de que los hombres y las mujeres deberían tener iguales derechos y oportunidades. Es la teoría de la equidad política, económica y social de los sexos. Yo comencé a cuestionarme las conjeturas basadas en el género hace mucho tiempo.

A los 8, me confundía que me llamaran "mandona" porque quería dirigir las obras de teatro que montábamos para nuestros padres. Pero a los niños no. A los 14, comencé a ser sexualizada por ciertos sectores de la prensa; a los 15, mis mejores amigas comenzaron a salirse de sus amados equipos deportivos, porque no querían parecer "machonas"; y a los 18, mis amigos hombres eran incapaces de expresar sus sentimientos. Decidí que yo era feminista. Y esto no me parece complicado. Pero mi reciente investigación me demuestra que el feminismo se ha vuelto una palabra antipática.

Las mujeres están eligiendo no identificarse como feministas. Aparentemente, me encuentro entre aquellas mujeres cuyas expresiones son vistas como muy fuertes, "muy agresivas", aisladas y anti-hombres, incluso poco atractivas. ¿Por qué la palabra se ha vuelto tan incómoda?

Vengo de Inglaterra y pienso que es correcto que me paguen lo mismo que a mis colegas hombres. Pienso que es correcto que yo pueda tomar decisiones sobre mi propio cuerpo, pienso que es correcto que las mujeres se involucren en mi nombre en las políticas y decisiones que afecten mi vida. Pienso que es correcto que, socialmente, se me deba el mismo respeto que a los hombres.

Pero tristemente, puedo decir que no existe un solo país en el mundo donde todas las mujeres puedan esperar recibir estos derechos. Ningún país en el mundo puede decir que ha alcanzado la equidad de género. Considero que estos derechos son derechos humanos, pero soy una de las afortunadas, mi vida es un auténtico privilegio porque mis padres no me amaron menos porque fuera hija. Mi escuela no me limitó por ser niña. Mis mentores no asumieron que llegaría menos lejos porque algún día podría dar a luz a un hijo. Estos agentes fueron los embajadores de la equidad de género que me hicieron quien soy el día de hoy.

Puede que ellos no lo sepan, pero ellos son los feministas inadvertidos que están cambiando el mundo hoy en día. Necesitamos más de estos, y si ustedes aún odian la palabra, no es la palabra lo que importa. Es la idea y la ambición detrás de ella. Porque no todas las mujeres han recibido los mismos derechos que yo he recibido. De hecho, estadísticamente, muy pocas los han tenido.

En 1997, Hillary Clinton dio un famoso discurso en Beijing acerca de los derechos de las mujeres. Tristemente, muchas de las cosas que ella quería cambiar aún están presentes en nuestros días. Pero lo que más me impresionó fue que menos del 30% de la audiencia eran hombres. ¿Cómo podemos tratar de cambiar el mundo cuando sólo la mitad de él se siente bienvenido o invitado a participar en la conversación?

Hombres, me gustaría aprovechar esta oportunidad para extenderles una invitación formal. La equidad de género es asunto de ustedes también. Porque, a la fecha, sigo viendo menospreciado por la sociedad el rol de mi padre en la paternidad a pesar de que, en la infancia, su presencia me era tan necesaria como la de mi madre. He visto a hombres jóvenes sufrir enfermedades mentales, incapaces de solicitar ayuda, por miedo a que eso los hiciera menos entre los hombres -o menos hombres. De hecho, en el Reino Unido, el suicidio es el mayor asesino de hombres de entre 20 y 49 años, eclipsando a los accidentes viales, el cáncer y la enfermedad coronaria. He visto a hombres volverse frágiles e inseguros por un sentido distorsionado de lo que constituye el éxito masculino. Los hombres no tienen, tampoco, los beneficios de la equidad.

No queremos hablar de que los hombres se vean atrapados por los estereotipos de género, pero puedo ver que lo están. Cuando sean libres, las cosas cambiarán para las mujeres como consecuencia natural. Si los hombres no tienen que ser agresivos, las mujeres no serán enseñadas a ser sumisas. Si los hombres no necesitan controlar, las mujeres no tendrán que ser controladas.

Es tiempo de que todos veamos el género como un espectro en lugar de como dos conjuntos opuestos de ideales. Deberíamos dejar de definirnos por lo que no somos y comenzar a definirnos por lo que somos. Todos podemos ser más libres y eso es de lo que se trata ÉlPorElla. Se trata de libertad. Quiero que los hombres tomen esta responsabilidad para que sus hijas, hermanas y madres puedan ser libres de prejuicios, pero también para que sus hijos tengan permiso de ser vulnerables y humanos también, y que al hacerlo, sean una versión más completa y verdadera de sí mismos.

Ustedes podrían pensar, "¿Quién es esta chica de Harry Potter? ¿Qué está haciendo en Naciones Unidas?". Y es una muy buena pregunta. Yo misma me lo he estado preguntando. Todo lo que sé es que me importa este problema y quiero ayudar. Y al ver lo que he visto y dada la oportunidad, siento que es mi responsabilidad decir algo. El estadista Edmund Burke dijo que todo lo que las fuerzas del mal necesitan para triunfar es que los buenos hombres y mujeres no hagan nada.

En mi nerviosismo por este discurso y en mis momentos de duda, me he dicho firmemente a mí misma, "Si no soy yo, ¿quién? Si no es ahora, ¿cuándo?" Si ustedes tienen dudas similares cuando las oportunidades se les presenten, espero que esas palabras les sean de ayuda, porque la realidad es que, si no hacemos nada, tomará unos 75 años, o para mí, casi llegar a los 100, antes que las mujeres puedan esperar que se les pague lo mismo que a los hombres por el mismo trabajo. 15.5 millones de niñas se casarán en los próximos 16 años aun siendo niñas, y en las tasas actuales, no será sino hasta el 2086 que todas las niñas en el África rural puedan cursar la educación secundaria.

Si tu crees en la equidad, podrías ser uno de esos feministas inadvertidos de los que hablé antes y, por esto, te felicito. Estamos luchando por una palabra que nos una, pero la buena noticia es que tenemos un movimiento que nos une. Se llama ÉlPorElla. Los invito a dar un paso adelante y preguntarse a ustedes mismos, "Si no soy yo, ¿quién? Si no es ahora, ¿cuándo?". Muchas, muchas gracias."

viernes, 1 de agosto de 2014

Tú, solamente tú.



“He perdido al mejor hombre que conocí en mi vida. He perdido a aquel con el que me veía día a día. Y no sé qué me duele más; saber que ya no es mío. O saber que fui yo quien dio todo por perdido.”

Lo extraño y mucho. Hoy preparando mis cosas para mi primer día de clases de repaso, de casualidad encontré unas hojas, esas hojas trajeron muchas emociones consigo, muchos recuerdos y experiencias pasadas, muchas cosas que ya había ocultado y cerrado con llave en el fondo de mi corazón. Lo sentí tan cerca, tan mío, quería tenerlo en ese mismo instante a mi lado. Quería traerlo de vuelta, ir a buscarlo en donde quiera que el este y traerlo aquí, cerca mío, sentirlo mío otra vez.

“Si pudiera cambiar el tiempo cambiaría lo que ahora siento. Si tuviera por un momento el tiempo en mis manos no diría nada, sólo te miraría. Lo haría todo más fácil, sin palabras, para no escuchar tu voz y luego tener que echarla de menos.”

Había pensado anteriormente muchas veces en él, lo imaginaba cerca, soñé mil veces con nuestro encuentro, me pase recordando cada momento que pasamos juntos, cada salida a pasear , cada nueva aventura vivida a su lado, todas las experiencias que juntos compartimos y cada palabra que él decía; trataba de descubrir que es lo que hubiera pasado si yo me quedaba, nunca llegue a una conclusión exacta así que por lo tanto desistí en el intento y lo olvide, con el tiempo ya lo recordaba menos , deje de pensar en él y llego el momento en que no lo recordé más.

“Sé por experiencia que, en la vida, solo en contadísimas ocasiones encontramos a alguien a quien podamos transmitir nuestro estado de ánimo con exactitud, alguien con quien podamos comunicarnos a la perfección. Es casi un milagro, o una suerte inesperada, hallar a esa persona. Seguro que muchos mueren sin haberla encontrado jamás”

Después de tantos meses recién logre entender que lo quería mucho, aun no sé si como amigo o como algo mas pero sé que daría mi vida con tal de tenerlo en este momento a mi lado. Era divertido pasar tiempo  con él, conversar de cualquier tema, salir a pasear como ya se nos había hecho costumbre. Con él todo era fácil, podía ser yo misma, podíamos hablar sobre cualquier cosa y él siempre tenía respuestas para todo y muchas preguntas, no hubo un solo día que nos quedáramos sin un tema de conversación, todos los días con él eran simples, eran hermosos; entre nosotros no existían los silencios incomodos, todo era tan fácil.

“Me quería sin condiciones, me aceptaba tal como soy, con mis limitaciones, manías y defectos, me aplaudía aunque no lo mereciera.”

Me gustaba salir con él porque por más que nunca sabíamos a donde nos llevaba el viento, encontrábamos un lugar adecuado para nosotros, nunca me puse nerviosa, nunca dude en decir algo, era yo, siempre fui yo, Leslie en esencia pura, era la verdadera Leslie. Nunca fui tan yo misma, solo él podía hacerme sentir de tal manera, solo con él podía ser libre.

“Es fácil sacarse la ropa y tener sexo; las personas hacen eso todo el tiempo. Pero, abrir tu alma a alguien y dejar que descubra tus miedos, tu futuro, tus sueños y tu espíritu… Eso es estar realmente desnudo”

Ahora lo entiendo, lo tengo todo claro, yo me sentían como un ave, disfrutando del vuelo, del aire en mi rostro de la adrenalina fluyendo en mi interior, de la libertad que solo con él sentía pero tuve tanto miedo de enamorarme de él y de perder esa libertad, esa amistad que los dos teníamos.

“Lo supe siempre. No hay nadie que aguante la libertad ajena; a nadie le gusta vivir con una persona libre. Si eres libre, ése es el precio que tienes que pagar: la soledad”

Tenía miedo de enamorarme, así que la decisión que tome en ese momento fue huir, era lo único que me quedaba. Y me fui.

“Ahora puedo decirte que tomé la decisión correcta, sin embargo no hay un día que pase sin arrepentirme de no haber tomado una opción diferente.”

“Pero ahora saben que hubo un hombre llamado…… y que él me salvó en toda forma que alguien puede ser salvado. Ni siquiera tengo una foto de él. Él existe ahora sólo en mi memoria.”
(Fragmento de mi diario)

domingo, 13 de julio de 2014

El mundo en el que vivo

Ya no quiero tener esta vida, quiero otra, le he pedido mil veces a Dios que me lleve con el pero nunca ha respondido y es que es muy fácil morir lo difícil es mantenerse con vida.

 No le he contado esto a nadie porque van a pensar que tengo pensamientos suicidas y no es así, solo hay momentos en que desearía no existir, estar muerta porque ahí todo es más fácil, no tendría que preocuparme por nada, ¿No les ha pasado que tienen un problema y por una vez en la vida quisieran  cerrar los ojos hasta que todo pase? A mí sí.

En realidad no quiero morir, no podría dejar a mi madre sola, tampoco tengo miedo a la muerte pero siento que aún me quedan muchas cosas por hacer, aún tengo la esperanza de cambiar al mundo. Y creo que es por eso que Dios aun no lleva con él o probablemente porque mi sitio no está en el cielo, quizá en el infierno.

Lo que realmente quiero es que todo pase, estoy cansada de que siempre suceda lo mismo. ¿Por qué a mí no me toco otra vida? Yo sabría aprovechar mejor el dinero a diferencia de otras personas que lo tienen y lo gastan en cosas banales.

Lamentablemente esta es la vida que tengo y solo me queda sobrevivir, esta es la vida que me tocó vivir y no puedo cambiarla. Esta es la única familia que tengo. Nada más.

Como es costumbre de mi familia cambiarme los planes a último minuto, no dudaron en hacerlo otra vez. Había planeado ir a una discoteca con mis amigas por mi cumple N° 19 y la gran mala noticia es que no podré ir ¿Por qué? Porque no he ingresado aun a la universidad y no tengo permiso para salir a ningún lado. Una vez que ingrese ya puedo hacer lo que yo quiera, aunque lo dudo mucho porque para mí siempre hay restricciones ¿Por qué? Quien sabe, quizá porque soy mujer ya que déjenme decirles que mi familia es súper machista y sé que nunca cambiaran, no creo que exista otra razón por la que no me permitan hacer algo, o quizá porque son sobreprotectores ya que soy la primera nieta y desde pequeña me han cuidado como si fuera oro; aunque yo apostaría de que la única razón aquí es porque soy mujer.

Solo me queda la esperanza de salir de esta casa. No digo que sea un infierno en el que vivo porque siempre me han tratado bien y nunca me ha faltado nada pero hubiera deseado un poco más de libertad, daría mi vida por más libertad; con eso no quiero decir que me voy a perder cada fin de semana, ni que regresare con el pan cada domingo, no soy de las personas que para de fiesta en fiesta o que está metida en las discotecas pero de vez en cuando necesito des-estresarme y bailar es el modo perfecto para olvidarme de todos mis problemas. Y no es igual bailar en la sala de mi casa con mis primas que por cierto todas son menores que yo, a divertirme con mis amigos en una pista de baile. No, no tiene comparación.

Pero como la suerte nunca está de mi lado, no podré hacerlo. Quizá nunca pueda hacerlo. 
(Fragmento de mi diario)

viernes, 11 de julio de 2014

Querido ex :


“Si hoy volvieras con los ojos cargados de promesas, con las manos cargadas de caricias; si hoy volvieras con la mente ya limpia de traiciones, con el alma ya limpia de rencores ¿qué podría yo darte? Mis ojos ya vieron muchos paisajes, mis manos se han hastiado de caricias, tu imagen se ha borrado de mi mente y tengo un alma nueva cada día...Si hoy volvieras a amarme, serías en mi vida un pobre extraño; para el perdón, el tiempo no ha corrido, pero para poder amarte es ya muy tarde.”

Es bueno saber de ti después de mucho tiempo, admito que los primeros días después de haber cortado no tenía ganas de verte (es muy normal en mí, yo me tomo mi tiempo para superar las cosas), aunque con el tiempo todo eso paso, todo lo malo pasó. Ya todo está superado y mi corazón ya sano.

Me pides una nueva oportunidad para arreglar las cosas, para empezar de nuevo, para amarme y te entiendo, comprendo tu punto de vista, lo respeto y lamentablemente no lo comparto. Te creo cuando dices todas esas cosas acerca de que cambiaste y te diste cuenta de que es lo que querías realmente, veo el arrepentimiento en tus ojos y en tu voz cuando me lo dices , solo que ya es muy tarde.

Nuestra ruptura para mí fue muy dolorosa, tengo que admitir que sufrí mucho pero el sufrimiento ya pasó, nuestro tiempo ya pasó, ya termino, es hora de seguir adelante, es hora de tomar caminos separados. Regresar sería algo así como leer el mismo libro dos veces, por más que te demores o lo leas rápido, ya sabes el final.

Soy sincera contigo, siempre lo fui; por esta razón no puedo darte la oportunidad que me pides, no es por ser mala ni porque me quiera vengar, ni porque me estoy burlando de ti, ni porque te quiero hacer pagar por todo lo malo que me hiciste, no, no es por eso, no soy rencorosa ni busco venganza, ya todo está perdonado y olvidado. Con el tiempo comprendí que las personas muchas veces hacen cosas sin pensar que pueden llegar a lastimar a otra persona, por eso es que hace mucho tiempo las cosas ya están perdonadas. Darte una oportunidad seria jugar con tus sentimientos y yo no soy esa clase de persona.

Quiero que sepas que no te juzgo por las acciones del pasado, eso ya está olvidado y en el pasado se quedaran, en lo que a mi respecta, yo ya las borre de mi memoria. Quiero quedarme con los lindos momentos que pasamos juntos, con la historia hermosa que nosotros compartimos, no me arrepiento de haberte elegido a ti, aprendí muchas cosas contigo y siempre te tendré un cariño especial. Pero ahora es mi tiempo de aprender sola, de hacer las cosas que yo deseo, de las nuevas metas que tengo y de los sueños que yo quiero cumplir, solo que esta vez debo realizarlos lejos de ti.

Adiós.