Hasta ahora no puedo entender la mente enferma de esas personas que abusan de menores de edad para satisfacer sus malditos placeres.
Pobres las personas que son víctimas
de estos abusos. Mi mama trabaja con una psiquiatra y ella me contó como sufren
las víctimas, sentí pena por supuesto pero nunca lo llegas a entender
completamente si es que no te pasa.

Me siento un poco mal por esa
experiencia vivida pero al mismo tiempo me siento valiente de haberlo detenido
a tiempo y de defenderme de todo, no me importo dejarlo mal herido; lo
importante era salvarme. Y lo logre.
Decidí contarlo por acá, porque sé
que hay muchas víctimas de esto y sé lo que se siente que te acosen. Pero lo
importante es defenderte como puedas y denunciar estas cosas. De ahora en adelante espero no volver a ver nunca más a esa persona y tomare cartas en el asunto sean penales, judiciales o cualquier otra.
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